No tengo últimamente muchas palabras que decir
porque ya me salen solas cuando te tengo delante.
Me salen tan solas que a veces lleno la habitación de frases que no tienen sentido,
pero si sentimientos.
Lleno todo lo que me rodea:
lleno la ventana de vaho
lleno la cama de calor
deseo
pasión
lleno los corazones de alegría que salpica al vernos llegar
lleno de deseo cada rincón de tu cuerpo
y de besos cada milímetro de tu cuello
lleno hasta de deseos el futuro
le enseño fotos tuyas
y le digo que se vaya acostumbrando a ti,
que no te dejaré escapar ni aunque tengas ganas de huir.
No te dejaré ir sin mi de la mano,
no seremos dos extraños nunca más.
Y seremos todo lo que tengamos que ser,
pero seremos.
Y volaremos tan alto como dejes a mi corazón,
y soñaremos tanto como nos deje la cama,
y sonreiremos tanto como veces te mire a los ojos,
y lloraremos tantas veces se nos rompa el corazón,
pero no por mi
ni por ti.
Y te diré tantas cosas bonitas como tantas veces este junto a ti, y te dejaré sonrojar a las margaritas y desnudar al sol para que vuelva rápidamente el invierno y volver a ser uno, tapados con esa manta que guarda cada segundo de amor y de pasión.
Y te dejaré hacerme feliz
y te dejaré mi corazón, pero guárdalo como un tesoro, quizás puedas poco a poco reconstruirlo y que vuelva a ser completamente feliz.
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